A brindarles atención
Según los datos de la OMS, cada año 200 niños y 1.500 adolescentes se suicidan en Rusia y entre los países europeos Rusia ocupa el primer lugar por cantidad de suicidios de menores.
El defensor de los derechos del niño en Rusia, Pavel Astajov, asegura que 5.000 adolescentes de edades entre 15 y 19 años que se quitaron voluntariamente la vida durante los últimos tres años, podrían estar vivos. Habría menos suicidios si existiera un sistema elaborado de prevención de suicidios y de ayuda psicológica a los menores. Actualmente en 48.000 escuelas trabajan 16.000 psicólogos, lo que significa que para cada especialista hay 800 alumnos, una proporción poco favorable, según Astajov. El defensor de los derechos del niño subraya que el país carece en absoluto de un sistema de asistencia psicológica para prevenir los suicidios entre los menores.
A pesar de que este año la cantidad de suicidios infantiles disminuyó un 1 % en comparacion con el año pasado, hay que seguir alerta, comenta el profesor de Psiquiatría Yevgueni Lubov.
“En el 80% de los suicidios resulta que el niño padecía de trastornos psicológicos, sobre todo de depresión. Pero a menudo los profesores lo toman por pereza del alumno, y los padres a veces solo echan leña al fuego. Resulta que solo el 1% de los niños recibe ayuda especializada. Por eso hay que desarrollar un servicio que prevenga los suicidios y hacer encuestas y pruebas anónimas entre los alumnos y sus padres”, explica Lubov.
Los datos estadísticos muestran que los suicidios infantiles son un problema extremo en China, la India, Sri Lanka y los países de Europa oriental, mientras que en Egipto, Haití y Jamaica los índices de suicidios entre los menores son casi nulos.
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