CIENTÍFICOS AVANZAN EN LA TELETRANSPORTACIÓN CUÁNTICA

Científicos de la Universidad de Ginebra lograron teletransportar un fotón hacia un cristal situado a 25 kilómetros de distancia utilizando fibra óptica, y demostrando que en la mecánica cuántica no importa la composición de la partícula, sino el estado.

YA ES CASI UN HECHO

Viajar sin tener que subirse a un coche, un avión o un barco es el sueño de mucha gente entusiasmada desde la época de la serie Viaje a las Estrellas, en la que los personajes eran desmaterializados y vueltos a materializar en otro lugar. Según un estudio publicado en Nature Photonics, estamos cada vez más cerca de lograr la tan anhelada teletransportación.

Científicos de la Universidad de Ginebra avanzaron en la teletransportación cuántica al demostrar que se pueden construir redes de larga distancia capaces de llevar el estado de un fotón a un cuerpo físico.

Según publica FayerWayer, el experimento logró teletransportar un fotón hacia un cristal situado a 25 kilómetros de distancia utilizando fibra óptica, demostrando que en la mecánica cuántica no importa la composición de la partícula, sino el estado, que se conserva, independientemente del medio. Si se toma al cristal como una especie de memoria de estado sólido se pueden comenzar a construir redes para transmitir esta información a través de largas distancias. El récord previo del método del profesor Gisin viene de 2003 y era de 6 Km, los 25 Km del estudio actual son un paso en la dirección correcta, que sumado con los recientes avances en la computación cuántica puede llevarnos a una nueva era en las comunicaciones o, incluso, en la seguridad porque este efecto cuántico, que no tiene un equivalente clásico, es perfecto para cifrar información.

La teletransportación cuántica funciona cuando dos partículas separadas por una distancia "n" se encuentran entrelazadas y los cambios que se le haga a la partícula A los va a sufrir también la partícula B. Esto se ha hecho en varias ocasiones, en una de ellas la distancia fue de 97 Km pero el principal problema es que solo se transmite el estado de la partícula, no materia ni energía y no se puede usar para superar el límite de velocidad del universo: 299,72,458 metros sobre segundo.