POR UN BUEN HÁBITO
Su creador, el estudiante de Stanford Maneesh Sethi, asegura que es posible convertir un mal hábito en uno bueno en apenas 30 días. Eso sí, tenemos que bancarnos una descarga eléctrica cada vez que hacemos algo que nos aparta del objetivo.
La idea de Pavlok surgió cuando se dio cuenta de que, cuando tenía que tomar una decisión normalmente tomaba la incorrecta, aunque sabía que lo era. Esto le animó a iniciar una investigación sobre los hábitos humanos, y de sus conclusiones nació la pulsera que funciona así: una vez que te comprometes a realizar ciertas acciones, si no las cumplís recibís una pequeña descarga eléctrica que te "obliga" a cambiar tus hábitos. También se incluye la posibilidad de recompensarte por cumplir todas las tareas en el tiempo acordado.
Por supuesto todo puede ser sincronizado con un app y en tu trabajo de reeducación pueden participar tus amigos.
¿Quién era Pavlov?
La pulsera está inspirada en Pavlov, el fisiólogo ruso ganador del Premio Nobel, cuyas investigaciones con perros fueron la base del llamado Condicionamiento Clásico.
Pavlov notó que cuando en la situación experimental un perro escuchaba las pisadas de la persona que habitualmente venía a alimentarlo, salivaba antes de que se le ofreciera efectivamente la comida; no obstante, si las pisadas eran de un desconocido, el perro no salivaba.
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